Solo hay una razón por la que no quiero que esta mujer haya sido mi maestra y es porque tengo la suerte de que sea mi hermana. Mi hermana mayor. Mi Tata.
Pero solo por eso porque a poco que lo piense es difícil encontrar a un maestro mejor que ella. Los habrá iguales, posiblemente, pero no mejor. Mi hermana lleva casi 30 años trabajando y va al colegio cada día con su mejor sonrisa y cargada de amor, mucho amor, para sus niños. Vive pensando en qué hacer para mejorar cada día en su trabajo y no hay nada que le haga más ilusión que idear alguna actividad nueva con ellos. Bueno, a lo mejor sí, puede que estrenar un traje de flamenca le haga la misma ilusión porque, como le decimos en casa, es una disfrutona.
Como casi todas las familias hemos tenido en la nuestra malos momentos, algunos terribles, insoportables y crueles. Incluso en esos días en los que nos costaba salir de la cama mi hermana Maribel, mi Tata, esperaba a sus alumnos en la fila del colegio con su sonrisa y haciendo locuras. Lo sé porque es el colegio de mis hijos y la espiaba orgullosa desde el otro lado de la reja. Este año, como sabéis los que nos conocéis, sufrimos la peor de las desgracias el 20 de mayo, pero ni ella ni mi hermana pequeña, Rocío, dejaron de preparar el baile de sus alumnos para fin de curso y se disfrazaron y bailaron con ellos en la fiesta mientras estaban rotas por dentro y el resto de la familia las admirábamos llorando de orgullo.
Mi Tata, mi madre y mi hermano Salvador, mi Tato, en la piscina de Coria |
Hoy cumple 50 años y está más guapa que nunca porque no hay mejor tratamiento de belleza que la generosidad, la entrega y la alegría. Y esa es mi Tata, esa mujer que es capaz de esconder todo su miedo y su dolor detrás de una canción infantil, muy mal cantada porque tiene una oreja enfrente de la otra, es verdad, pero con una coreografía que deja embobados a sus alumnos.
Mi hermana y yo en la Feria de Abril del colegio |
Ella fue la primera que decidió ayudar a Sonia en aquella terapia que os conté hace casi 5 años. Cuando era una muchachita de 18 años y salía de paseo por las noches volvía a casa cuando Sonia y yo ya estábamos dormiditas. Llegaba taconeando y alegre. Nos despertaba porque le daba pena dormirse sin hablar con nosotras. Cuando ya lo había conseguido, despertarnos, le preguntábamos cómo lo había pasado. Nunca nos lo contó, se quedaba frita enseguida. Sonia y yo nos quedábamos despiertas prometiendo que no nos lo haría nunca más. Pero se repitió cada noche. Siempre. Hasta aquella noche fatídica en que le dio por casarse y Sonia y yo nos quedamos tristes porque ya no volveríamos a escuchar su taconeo. Porque ya no tenía su ropa en nuestro ropero...
Bueno, no se fue mucho, la verdad. Eso es una de las cosas que más feliz me hace en este mundo, que siempre estamos toda la familia junta :)
Quería, necesitaba, escribir esta nota en mi blog para darle las gracias públicamente a mi hermana por todo lo que lucha por toda la familia y con toda la familia, por no perder nunca la sonrisa, por estar siempre para todo y para todos. Necesitaba repetirle, una vez más y hasta que se lo crea, que es la mejor, que no se puede ser mejor que ella en nada. Bueno, vale, cantando, pero solo en eso. Y también, qué narices, porque quería presumir de hermana. De hermana y de familia porque es lo mejor que tengo, el motor de mi vida.
Con mi madre y mis hermanas: Sonia, yo, mamá, Tata y Rocío. |
Feliz cumpleaños, Tata. A por otros 50 años, a por más de 50 cuentos, más de 50 canciones, más de 50 disfraces, más de 50 trajes de flamenca, más de 50 millones de sonrisas. Necesitamos todo eso de ti. Y más.
Te quiero, loca.
Hermosa entrada en tu blog !!!
ResponderEliminarCreo que con tus palabras has definido a la perfección a una gran persona y una gran amiga. Doy fe de todo lo que narras pues he tenido la suerte de ser compañera de carrera, de hacer curso, de planificar muchos líos pedagógicos ....pero me quedo con que es MI MEJOR AMIGA.
Gracias Clara por expresar con estas lindas palabras lo que muchas personas pensamos.
Felicidades seguro que mañana al colegio llegará con una sonrisa y su cuña de Coria.
Disfrútalo.
Es que con estas historias cómo no se le va a querer, si la quiero hasta yo que no la conozco de nada :D ¡Guapa! ¡Felicidades!
ResponderEliminarPues te diré que me gustó mucho esta entrada que le regalas a tu hermana, y haz de saber que también cumplí años este 21 , y como un escrito optimista y cariñoso, lo he sentido como un regalo el día de hoy.
ResponderEliminarFelicitaciones.